Llega el verano y con ello los robos, cada vez más frecuentes, en las viviendas que quedan vacías. Los amigos de lo ajeno se especializan cada año más en sus acciones, las nuevas tecnologías que sirven para mejorar la seguridad de las viviendas, también sirven a los ladrones para perfeccionar sus fechorías.
La urbanizaciones y polígonos industriales son el objetivo prioritario de las bandas organizadas, las cuales disponen de herramientas y tecnologías muy sofisticadas para perpetrar su robos. Los servicios de vigilancia de estos enclaves, se ven imposibilitados muchas veces para poder neutralizar las acciones de dichas bandas entre otros motivos por la carencia de herramientas que puedan competir con las de estas bandas.
Levantina de Seguridad, empresa líder en el sector de la seguridad privada en la Comunidad Valenciana y con una alta especialización en el control y seguridad de urbanizaciones y polígonos industriales, consciente de la constante evolución en las técnicas utilizadas por las bandas de delincuentes especializados en robos, ha incorporado recientes mejoras en sus patrullas de vigilancia para contrarestar y prevenir las posibles intrusiones en viviendas y empresas bajo su custodia.
Una de sus novedades es la dotación de visores nocturnos de detección térmica con el fin de ampliar el campo de visión en la oscuridad. Estos visores que hasta hace poco solo veíamos en películas bélicas, son capaces de detectar el calor humano en la oscuridad y facilitar por lo tanto la labor de inspección y supervisión de zonas con escasa o nula iluminación a los vigilantes de seguridad de Levantina. Con esta novedad se pretende conseguir una mayor efectividad tanto en la prevención como en la retención de intrusos. Así pues, en las rondas habituales que practican los vigilantes tanto en urbanizaciones, como en polígonos industriales, estos visores nocturnos les permitirán ver a posibles delincuentes que utilicen la oscuridad como tapadera y que hasta ahora eran difíciles de localizar.
Otra de la incorporaciones que se prevén para este verano, son los detectores de inhibidores de frecuencia. Los inhibidores de frecuencia, frecuentemente utilizados por las bandas organizadas, imposibilitan que las alarmas se comuniquen con la central, impidiendo la llegada de efectivos al lugar, por lo que de alguna manera dejan inservibles los dispositivos instalados. Levantina, con los detectores de inhibidores, pretende adelantar la presencia de ladrones en un área específica y por lo tanto frustrar o pillar “in fraganti” a los malhechores.